Historia
Este lugar constituía el Balneario y Centro Curativo más importante del Imperio Purépecha. Al manantial principal de aguas termales se le atribuía el poder de prolongar indefinidamente la juventud.
Varios siglos después, ante la indudable acción de sus aguas, los misioneros que se establecieron en la región se interesaron por las aguas de Agua Blanca y Fray Juan de San Miguel en sus memorias, narra su acción sorprendente:
“Que curaba todas las enfermedades y prolongaba la vida”.
En 1938, fecha en la que se terminó la carretera México-Guadalajara, que pasa por sus inmediaciones, Don Roberto Medellín, Rector de la UNAM, se interesó por investigar las propiedades del agua.
Después de la curación obtenida por el Ing. Francisco Vázquez del Mercado, miembro del gabinete del presidente Lázaro Cárdenas, adquiere lo que se constituyó como el Balneario Agua Blanca.
Este esfuerzo fue muy pronto seguido por los hermanos Henríquez Guzmán que construyeron el famoso Hotel San José Purúa, el cual en su momento fue el hotel más grande de México y que hoy en día funciona únicamente como balneario mientras las instalaciones del hotel se encuentran en ruinas.
En el 2001 la propiedad fue adquirida por los actuales dueños y cambia el giro a ser SPA y hotel ecológico. Éstos, por muchos años, habían soñado con alguna vez poder ser los guardianes de algún sitio en medio de la naturaleza, el cual se pudiera compartir con huéspedes de todo el mundo.
